lunes, 3 de mayo de 2010

Me opongo al rescate de Grecia

Me opongo por una razón muy simple ¿Por qué coño tenemos que pagar las imbecilidades económicas del presidente griego?. Que asuman las consecuencias de sus actos, como hace todo hijo de vecino.

Las políticas griegas basadas en una socialdemocracia que lo único que hacía era gastar como un borracho después de cobrar la paga extra han hecho el desastre que han hecho.

Algo parecido a lo que se está haciendo en este país donde el gasto público es desorbitado y un paro del 20,05%, algo insostenible y que va a colapsar.

Y el problema griego se soluciona:

- Salida del euro (bien temporal o definitiva)
- Reducción enorme en el peso del Estado
- Control máximo del gasto
- Reducción de impuestos al máximo para atraer capital
- Desregularización general de la economía
- Liberalización del mercado de trabajo

Con estas recetas el sistema griego empezará a recuperarse, tarde o temprano, pero se recuperará, a pesar de los sindicatos, que ya han expresado que a ellos le importa una mierda el futuro del país. Ellos, a cobrar, y si se baja el peso del Estado, cobran menos. El Estado no está para pagar a vándalos y borrokeros.

12 comentarios:

El Inconformista dijo...

Es deprimente que demos 10.000 millones de euros cuando media España está en el paro, le embargan sus casas y no tienen ni para comer. Pero hay que pensar que a nosotros no nos gobierna un Papandreu sino un Papahostias, que es mucho peor. Y falta nos hará toda la ayuda que podamos recibir, igual que ya nos hace falta ahora a los ciudadanos.

Alms dijo...

Pues yo también estoy en contra, principalmente porque no estamos para "tirarlo", pero también porque parece que van por buen camino hacia la solución que propongo:

-Tomar las calles.
-Desestabilizar la maquinaria estatal para, por medio de la violencia popular, derrocar el caduco sistema.
-Que el proletariado emerja como clase dominante, asuma las tareas del antiguo Estado (así como las de la antigua burguesía) y reconstruya el país con el trabajo de los obreros (y no con el dinero de los empresarios, que siempre se llevan más que dejan y no mueven un dedo).

D45 dijo...

O sea, quiere decir que para solucionar los problemas lo mejor es ir armados a liarla por las calles, tirar abajo el Estado e imponer el socialismo.

Como en 1917, vamos, y aquello acabó como el rosario de la aurora...

Alms dijo...

Bueno Daniel, ¿no creerás que algo así se consigue a la primera? Mira si no la Revolución Francesa, pionera en el impulso del capitalismo, que a menos de 10 años de su triunfo ya había fracasado (pasando por un delicado período llamado Reinado del Terror) y estaba siendo impuesta por la fuerza en Europa por Napoleón. Con sus altibajos, el capitalismo se ha mantenido a golpe de pistola durante más de 200 años, obsequiándonos con crisis periódicas que siempre pagamos los mismos.

Liarla en las calles, por tanto, no es más que un acto de defensa de los desposeídos. Aquello que comenzó en 1917 y que acabó como el rosario de la aurora (y tanto, pues acabó en capitalismo) demostró que se podía cruzar el río de una forma relativamente segura y ahora, además, gracias a su experiencia, sabemos qué piedras no debemos pisar.

PD: Aprovecho para hacerme un poquito de publicidad (si me lo permites, Daniel) y enlazar mi Myspace para que, quien quiera, escuche mi música:

http://www.myspace.com/fill_the_gaps

fumador dijo...

Non estou de acordo coa receita que propós para solucionar o problema de Grecia. Tampouco vou perder o tempo argumentando contra cada medida en concreto. O único que vou sinalar é que as receitas neoliberais que formulas, francasaron alá onde se aplicaron:
Chile, Brasil, Paraguay, Bolivia, Polonia, Venezuela, Sudáfrica, Os tigres asiáticos, Rusía, Arxentina, EEUU, Uruguay, Irak... En todos eses países aplicouse a doctrina Friedman e deron en crises estruturais que só se supera coa republicanización económica. O neoliberalismo é a historia dun fracaso, insisto.

Javier dijo...

Si alguien intenta atentar contra los bienes públicos o la propiedad privada, para eso están las pelotas de goma y los gases lacrimógenos. También la privada, ya que las leyes socialistas no me permiten ejercer el derecho de autodefensa y usar una escopeta para defenderla.

En el comunismo no hay crisis. En la antigua Unión Soviética así como en otros regímenes comunistas no existían los ciclos económicos de crecimiento y recesión: como la crisis era permanente, ese concepto no existía.

En cuanto a Grecia, los políticos se volvieron adictos al gasto y a la deuda, con unos presupuestos desequilibrados y, encima, falsificados, y ahora les toca a los habitantes de la antigua Hélade pagar las facturas. Van a tener que trabajar no para consumir, ni para acumular un patrimonio mayor, sino sólo y exclusivamente para devolver el dinero que dilapidaron sus políticos. Sufrirán toda clase de recortes y restricciones en su calidad de vida, como consecuencia directa de las desmedidas e irreales capacidades de gasto con las que contaron sus irresponsables gobernantes. Los sindicatos griegos ayer se echaron a la calle contra el FMI, que es lo fácil. Allí, las pelotas de goma y los gases lacrimógenos van a volar largo tiempo.

Ojala este no sea el ensayo de lo que podamos ver aquí. Motivos para el optimismo no hay demasiados, con este Gobierno inmerso en el derroche sin fin, en el autismo y en la huida hacia adelante, a pesar de las quiebras empresariales y los cuatro millones y medio de parados. El socialista Joaquín Almunia, comisario europeo de Competencia, sostiene que "España está en el tiempo de descuento".

Tanto hablar de hiper regular los mercados... pero, ¿quién hiper regula a los gobiernos?

Javier dijo...

“Mira si no la Revolución Francesa, pionera en el impulso del capitalismo”

Error: los grandes totalitarismos del siglo XX, fascismo y comunismo, aprendieron mucho de la Revolución Francesa y rescataron sabiamente para sus intereses cosas como un comité central que asumió todos los poderes, tribunales revolucionarios políticos, un control absoluto sobre la población mediante unos comités municipales de vigilancia, falta de garantías procesales, crímenes de Estado, una ley de sospechosos para perseguir a los ideológicamente contrarios a la revolución que permitió asesinar legalmente a millares de personas con la "igualitaria" guillotina, encarcelamientos preventivos masivos, deportaciones a ultramar, incluso un genocidio como el de la región de La Vendée.

Gran diferencia, por ejemplo, con los revolucionarios americanos. Estos siempre recelaron del poder e intentaron desde el principio limitarlo. Realmente, sí que es verdad, lo de Norteamérica a finales del siglo XVIII no fue una revolución propiamente dicha. Fue una guerra. Una guerra justa, por otro lado, para restaurar unos valores ingleses. Unos valores que la propia Inglaterra había traicionado.

Usted no lo sabe, pero no sólo es discípulo de Marx y Lenin, sino también de Robespierre.

Alms dijo...

En el comunismo no hay crisis. En la antigua Unión Soviética así como en otros regímenes comunistas no existían los ciclos económicos de crecimiento y recesión: como la crisis era permanente, ese concepto no existía.

Infórmate sobre el tema, pues el nivel de vida de la antigua Unión Soviética era muy superior al de cualquiera de sus repúblicas en la actualidad, bajo el capitalismo.

Yo no digo que el comunismo no haya tomado para sí ciertas lecciones de la Revolución Francesa (todo lo contrario, aprendió mucho de ella), pero la Revolución Francesa en sí misma fue burguesa y liberal, y jamás podría ser considerada como algo distinto. En efecto, albergo cierta admiración histórica por Robespierre (por lo revolucionario de su pensamiento en su día), pero no hay que olvidar que Robespierre fue el mayor liberal en toda la historia del liberalismo, te guste o no. También lo fue Napoleón, un gran estadista y estratega (todo hay que decirlo) que sembró guerra y muerte allí donde pretendía instaurar el sueño capitalista.

D45 dijo...

Fumador, ya de paso pon Cuba, China o Corea del Norte, ya por decir países...

Javier dijo...

"la Revolución Francesa en sí misma fue burguesa y liberal"

Las dos revoluciones liberales han sido la Gloriosa en la Inglaterra de 1688 y la Guerra de la Independencia de Estados Unidos.

La Revolución Francesa no "impuso" el capitalismo, como usted dice, lo único que hizo fue sustituir el poder absoluto del monarca por el de un Estado despótico. Alexis de Tocqueville llegó a afirmar que "en el Antiguo Régimen reinaba más libertad que aquellos días".

De hecho, la derecha continental europea no es liberal, es totalmente socialista e intervencionista, al contrario de la derecha británica y estadounidense.

"pero no hay que olvidar que Robespierre fue el mayor liberal en toda la historia del liberalismo"

El mayor liberal en lo político fue John Locke y en lo económico Adam Smith.

"que sembró guerra y muerte allí donde pretendía instaurar el sueño capitalista"

Los únicos sueños que se imponen con la guerra y la muerte son el comunismo, el fascismo y el islamismo radical.

El libre mercado es en sí mismo un procedimiento pacífico y eficiente. Detrás de la producción de cualquier bien tenemos cómo las fuerzas del mercado comunican naciones y personas de todas partes del mundo para generarlo. El mercado comunica a gente que jamás en la vida llegará a conocerse, que, quizás, de llegar a encontrarse, podrían ser incluso enemigos, pero que interactúan y realizan intercambios en función de un interés común. El mercado libre nos permite disfrutar de bienes y servicios que provienen de distintas partes del mundo.

Alms dijo...

Melvin, todo lo que dices son los tópicos habituales y las justificaciones que utiliza el liberalismo para echar balones fuera y desechar aquello que le avergüenza pero que, inevitablemente, se encuentra en su seno. El régimen despótico que se instauró en la Francia de finales del siglo XVIII fue ni más ni menos que el capitalismo en su estado más crudo, sin maquillar, elevando a los fuertes a la categoría de "individuos" y sometiendo a los débiles en el pozo de las "herramientas parlantes". Darwinismo social puro y duro. Lo mismo que consiguió, por otra parte, la "Revolución" (más bien un golpe de Estado, por no involucrar a las masas) Gloriosa, una vez alzanzada la Revolución Industrial y, por ende, el capitalismo moderno. El incipiente proletariado se vio sometido a una continua pauperización en favor de los burgueses, quienes decidían en qué, dónde, cuánto y por cuánto debían trabajar sin ningún tipo de garantías, sufriendo una cruenta segregación que les obligaba a vivir en cuchitriles y pasando todo tipo de necesidades que les impedían prosperar (léase La Situación De La Clase Obrera En Inglaterra, de F. Engels). Y esa "maravillosa" Guerra de Independencia en EEUU habría sido realmente maravillosa si después no se hubiera instaurado la Doctrina Monroe (vigente hasta nuestros días bajo nombres y formas diversas) que habría de explotar y esclavizar al resto del continente.

Como ves, el capitalismo es terrorífico en todas sus formas. La Revolución Francesa es el mismo capitalismo, pero sin disfraz.

¿Los gobiernos de derechas de la Europa continental son socialistas? ¡Ni siquiera los partidos de izquierdas lo son! A ver si estamos confundiendo socialismo con intervencionismo...

Por último, me parece muy bien la capacidad del libre mercado de aunar globalmente a los individuos para intercambiar bienes, pero no puedo aprobar su forma de producirlos, tratando la mano de obra como una mercancía más que se compra y se vende por el precio justo que cubre las necesidades (a veces ni eso) de los obreros. Mercado libre sí... pero JUSTO.

Ah, se me olvidaba: Los únicos sueños que se imponen con la guerra y la muerte son el comunismo, el fascismo y el islamismo radical. La Historia lamenta disentir después de presenciar los siguientes horrores capitalistas: la I Guerra Mundial, la de Vietnam, la de Corea, la de Iraq, la de Laos, la de Camboya, la Doctrina Reagan, la invasión de Bahía de Cochinos,... y, por supuesto, los muertos por hambre y enfermedades en todo el mundo que, día a día, nos muestran el horror del imperialismo.

fumador dijo...

D45,
que clase de argumento é ese? Non ten nin pés nin cabeza. O que dis non ten relación con que dixen.
Afirmo que as receitas neoliberais fracasaron alá onde se implantaron (por certo, en China nas áreas especiais tamén fracasaron: recoméndoche que te informes arredor do caso de Tia nang meng).
Eu non citei Cuba (que ten uns niveis de benestar superiores aos países da súa contorna) nin Corea do Norte, porque non coñezo nada dese país.
Porén, coñezo e teño lido sobre as crises dos países que cite. Contraargumenta, se tes razón. Se non podes, pois cala.